¿Sabías que la ingesta diaria de suplementos puede influir en cómo te recuperas de una cirugía estética? La regla general cuando se trata de una cirugía estética, es evitar tomar vitaminas y suplementos antes de la operación para minimizar el sangrado, lo que, a su vez, también ayudará a mantener los hematomas y la hinchazón al mínimo.
Pero eso no quiere decir que todos los suplementos están prohibidos. Antes de un procedimiento cosmético, tu médico revisará una lista de verificación antes y después de la operación para asegurarse de que el tratamiento sea seguro y efectivo.
Seguridad y Riesgo
Muchos ingredientes de suplementos contienen activos que pueden tener efectos fuertes en el cuerpo, en especial después de una operación. Siempre debes estar alerta a la posibilidad de una mala reacción, especialmente al tomar un producto nuevo.
Es más probable que tengas efectos secundarios de los suplementos dietéticos si los tomas en dosis altas que los medicamentos recetados, o si tomas muchos suplementos diferentes. Algunos ingredientes de suplementos pueden aumentar el riesgo de hemorragia o, si se toman antes de la cirugía, pueden cambiar tu respuesta a la anestesia.
Los suplementos también pueden interactuar con algunos medicamentos de formas que podrían causar problemas. Aquí están algunos ejemplos:
La vitamina K puede reducir la capacidad del anticoagulante warfarina para evitar que la sangre se coagule.
La hierba de San Juan puede acelerar la descomposición de muchos medicamentos y reducir su eficacia (incluyendo algunos antidepresivos, píldoras anticonceptivas, medicamentos para el corazón, medicamentos anti-VIH, etc).
Los ingredientes antioxidantes, como las vitaminas C y E, pueden reducir la eficacia de algunos tipos de quimioterapia contra el cáncer.
Algunos fabricantes pueden agregar vitaminas, minerales y otros ingredientes de suplementos a los alimentos, especialmente cereales para el desayuno y bebidas. Como resultado, es posible que obtengas más de estos ingredientes de lo que crees, y más puede que no sea mejor.
Consumir más de la dosis que necesitas puede aumentar tu riesgo de sufrir efectos secundarios. Por ejemplo, demasiada vitamina A puede causar dolores de cabeza y afecciones hepáticas, reducir la fuerza de tus huesos y causar defectos de nacimiento (en el caso de mujeres embarazadas).
El hierro es necesario para una serie de funciones vitales, como el crecimiento, la reproducción, la curación y la función inmunológica. Sin embargo, el exceso de hierro después de una operación, provoca náuseas y vómitos y puede afectar tu hígado y otros órganos.
Ten cuidado al tomar suplementos dietéticos si estás embarazada o amamantando, algunos ingredientes pueden ser peligrosos. Además, ten cuidado al administrar suplementos a un niño, a menos que lo recomiende tu médico.
Muchos ingredientes de suplementos no han sido bien probados para determinar su seguridad en mujeres embarazadas, madres lactantes o niños.
Si crees que has tenido una mala reacción a un ingrediente de suplementos dietéticos, informa a tu médico. Él o ella pueden informar tu experiencia a la FDA. También puedes enviar un informe directamente a la FDA llamando al 800-FDA-1088.
Y por último, también debes informar tu reacción al fabricante utilizando la información de contacto en la etiqueta del producto.